jueves, 24 de octubre de 2019

Queridos jóvenes

Es mi intención vivir, como mínimo, hasta los 100 años. Y vivir bien además, con la misma alegría y la misma belleza física que me caracteriza. Por tanto, espero que cuando estas palabras cobren sentido, el que aquí os escribe siga tan maravillosamente bien como siempre.

 Quiero daros un consejo que creo que os puede venir bien. Queridos míos, perdonad toda la vergüenza que os hacemos pasar por un tema tan doloroso como es el del franquismo. Perdonad a todos los que no tienen sensibilidad con los muertos de las cunetas que ya no existen, a los que opinan desde la ideología política y no desde la ética humana, a los que apoyan el homenaje a un dictador y no un reposo respetuoso sin más. Perdonad por haber consentido esta  vergüenza democrática en España durante más de cuatro décadas.

Perdonad, queridos míos, a vuestros padres y abuelos, a vuestros amigos… Perdonadlos a todos. En este año 2019, ellos todavía no habían entendido lo fundamental que es el progreso en temas tan delicados como este, la importancia simbólica de una dictadura y lo necesario que es para las víctimas que se hiciera justicia. Criticadlo, tenedlo siempre presente, ponedlos como ejemplo de lo que no hay que hacer… pero perdonadlos.  

Perdonadlos e intentad, aunque estén ya viejos los que queden, que entiendan lo fundamental que era todo esto. Vosotros, con vuestra visión actual, lo tenéis mucho más fácil que yo. Queridos míos, yo he tenido que ver la demagogia que han hecho en estos años todos ellos con este tema, los ataques que han hecho a los que buscábamos esto que hoy vosotros disfrutáis, la incomprensión, la poca sensibilidad…

He vivido una época de construcción y solidificación democrática, donde partidos políticos estaban contra el divorcio o el matrimonio homosexual, contra la exhumación de un genocida o contra la eutanasia para personas que ya no pueden aguantar más el sufrimiento. Ya sé que os parece surrealista y que no podéis entenderlo, pero es así.

Creo que ha sido una época en la que se han construido, en la que se están construyendo, unos ideales democráticos importantísimos, básicos. Esos que hoy vosotros disfrutáis. Por eso es fundamental que tengáis en cuenta esto que os pido. Perdonad. Criticad, sí, pero perdonad. Vuestros familiares y amigos, al igual que yo, hemos sido presas de esta sociedad a la que tanto le está costando evolucionar. Pero lo está consiguiendo, lo estamos consiguiendo.

Os escribo todo esto hoy, 24 de octubre de 2019, el día en el que se ha exhumado en el Valle de los Caídos al genocida Franco. Un día histórico para la democracia española. Y sí, ha sido un día de mucha vergüenza, de muchos haciendo demagogia e intentando defender con absurdos argumentos que esto no se hiciera. Gilipolleces, lo sé, pero así ha sido.

44 años hemos tardado en hacer las cosas bien.
Queridos jóvenes del futuro que hoy leéis esto, perdón.
Perdonad a los que no nos apoyaron, a los que lo criticaron.
Disculpad que hayamos tardado tanto en hacerlo.

Pero lo hicimos. Por las víctimas, por España.
Por la democracia. Gracias a la democracia.

No hay comentarios:

Publicar un comentario